Traqueobronquitis infecciosa canina
junio 23, 2021Traqueobronquitis infecciosa canina
La Traqueobronquitis infecciosa canina es una enfermedad infecciosa muy contagiosa. También se le llama ls Tos de las perreras.
Esta infección produce una inflamación de las vías aéreas superiores, y aunque es una enfermedad leve puede provocar una bronconeumonía que en cachorros (y más si están débiles) es en muy alto porcentaje mortal. En perros adultos produce bronquitis crónica y mucho más cuando el perro es viejo o tiene alguna otra enfermedad que lo hace inmunodeprimido.
La posibilidad de contraer la enfermedad aumenta con el estrés, las malas condiciones de alimentación, parásitos, los factores ambientales extremos de temperatura ventilación y humedad, sobre todo la falta de ventilación y las bajas temperaturas. Por esto, esta enfermedad es muy contagiosa y se difunde muy rápido entre perros susceptibles que se encuentran en condiciones de confinamiento (perreras, protectores de animales, guarderías caninas, clínicas veterinarias)
Prevención Traqueobronquitis infecciosa canina
Los perros deben inmunizarse con vacunas quíntuples o séxtuples que contienen además parvo, moquillo, hepatitis, corona y Leptospirosis.
La vacunación debe comenzar cuando el cachorro tiene 30-45 días y terminar a los 90 días aproximadamente colocándose de 3ª a 4ª dosis con un intervalo de 21 a 30 días. Luego se debe seguir con un refuerzo que se da una vez por año durante toda la vida del animal.
Cuando el riesgo de infección por Bordetella bronchiséptica es alto es preferible usar una vacuna intranasal avirulenta viva que contiene la bacteria o extractos bacterianos inactivados. Hay en el mercado una combinación de vacuna con B. bronchiséptica avirulenta y vacuna de Parainfluenza viva modificada para uso intranasal. Se administra una inoculación a cachorros mayores de 3 semanas
¿Qué provoca una Traqueobronquitis infecciosa canina?
La tos de las perreras es producida por varios agentes etiológicos que pueden actuar solos o en combinación. Dentro de dichos agentes se encuentran: la bacteria;
- Bordetella bronchiséptica
- Adenovirus tipo 2
- Virus Parainfluenza
- Micoplasma cynos.
El Adenovirus tipo 2 ya no tiene tanta importancia como agente causante de la enfermedad gracias a la eficacia y duración de la inmunidad por parte de las vacunas parenterales. La fracción de Parainfluenza que poseen no induce tan buena inmunidad. Este virus pertenece a la familia de los paramixovirus al igual que el virus del moquillo.
Bordetella bronchiséptica puede actuar como un agente primario, especialmente en perros menores de 6 meses de edad; pero también junto a otras bacterias puede causar infección secundaria como consecuencia de la lesión que provocan los virus en las vías respiratorias.
Diagnóstico de la Tos de las Perreras
El síntoma clínico más evidente son los ataques de tos persistente (tos paroxística) y áspera. También se pueden producir arcadas y ahogos durante estos ataques.
Puede haber anorexia parcial (disminución del apetito leve).
Si aparece fiebre, descarga nasal purulenta, depresión, anorexia y tos productiva en los cachorros se debe a una complicación con moquillo o bronconeumonía.
Debemos sospechar de Traqueobronquitis siempre que aparezca en forma súbita la tos paroxística que caracteriza a la enfermedad, la cual aparece a los 5-10 días de haber estado expuesto al agente etiológico.
También se pueden realizar análisis serológicos y bacteriológicos de laboratorio y radiografía de tórax que no suele indicar mucho en la forma leve pero en la forma complicada con bronconeumonía se suele observar un patrón de densidad intersticial y alveolar.
Tratamiento Traqueobronquitis infecciosa canina
Es preferible no hospitalizar a los perros afectados, ya que es una enfermedad muy contagiosa y autolimitante. El dueño debe saber que la recuperación de su perro va a ser más rápida mediante un manejo apropiado de la nutrición, higiene y del ambiente donde vive el perro (factores ambientales predisponentes).
Para controlar la tos no productiva persistente se pueden utilizar ciertas drogas derivadas de la codeína como la hidrocodona o el butorfanol, PERO SIEMPRE con revisión y recomendación del veterinario. En los casos crónicos graves se pueden administrar antibióticos, pero nunca con corticoides, pues están contraindicados en perros gravemente enfermos e inmunodeprimidos.